Che, El Argentino

Esta semana se ha estrenado el Biopic de una de las figuras revolucionarias mas importantes de la historia, "El Che", encarnado un Benicio Del Toro, que confunde al espectador, pues se asemejan como si de dos gotas de agua se trataran. El Film dirigido por Steven Sodenbergh tiena una duración de 4 horas y veinte minutos, aunque en nuestras salas, esta sera repartida en dos partes, una bajo el titulo de "Che, el argentino" y el otro con el nombre de "Che, guerrilla".

En la primera de las partes, se nos explica la llegada de los revolucionarios a la isla, su primeros enfrentamientos y como estos avanzan hasta llegar a controlar la Habana y con esto el poder completo de Cuba. Todo esto se nos reproduce intercalando pequeños flashbacks y flashforwards, que despistan un poco al espectador, pero que consiguen dar dinamismo al film que sin estos saltos en el tiempo, se haría quizás un poco pesada. 

Pero esto no es excusa para que nos partan este film a la mitad y nos vendan la película en dos partes. Es cierto que el cine como arte quizás esta desapareciendo o simplemente el arte se esta convirtiendo en un negoció, pero si ya nos quejábamos de que Grindhouse, no se pasara en Europa como doble sesión, algo que mantendría mucho mas el espíritu del film y que fue pensado para ser así. En el caso de Che, fue presentado en el festival de Cannes en su versión integra, pero en los cines es maltratado y cortado, algo que no gusta al publico una vez acabada la primera parte del film, ya que se podían oír montones de murmullos quejandose sobre el final del film, ya sea por ignorar una segunda parte, o simplemente por creer que 4 horas de película en los bien aclimatados cines de hoy en día, no es ningún esfuerzo.

Dejando de lado este desastroso aspecto, hay que mencionar que el film no se trata de una película política, si no un simple biopic, de mentalidad abierta. En el film podemos conocer las ideas del Che, sus pros y sus contras, el film no nos intenta atraer o por lo contrario odiar un sistema político o sus funcionamientos, algo que si que ocurria en un anterior biopic del revolucionario, interpretado en esa ocasión, por Omar Sharif, y que sin duda era un burdo ensayo de política fascista.

Libre de ideas, el film vive gracias a la gran interpretación de su actor principal, y al gran tirón que tiene la figura del famoso revolucionario, el cual se ha convertido en un icono de la juventud, muchas veces ignorante, que no conoce ni las ideas ni los métodos de este personaje, por el cual yo tampoco quiero mostrar un posicionamiento político o a su figura.

El film es pues, una obra épica con grandes posibilidades de reventar taquillas pero que quizas debido a la figura de la que trata no parece tener un espíritu financiero, algo que obliga a que la primera parte guste y funcione, pues si no es así, la segunda parte pasara a ser olvidada de forma rápida convirtiendose en una película de culto.